Los americanos tienen una frase: «vamos a atender el elefante en la habitación». Esta frase se refiere a un problema muy grande que está presente, pero nadie quiere tocar el tema.
Recientemente en redes sociales, hice una publicación:
Ser gerente no es dar órdenes o tener autoridad. Si tu día transcurre haciendo cosas operativas no estás siendo gerente. El gerente planea, dirige, controla y organiza y opera muy poco. Ser gerente es ser diferente al experto que fuiste alguna vez. Sé experto en gestión.
Hubo algunas reacciones, pero en particular en LinkedIn (la red social de profesionales) el asunto «explotó», o como dicen por ahí se volvió viral (en comparación con otras de mis publicaciones).
Al momento de escribir estas palabras, tiene 18,409 visualizaciones, unas 363 reacciones y se compartió cerca de 16 veces. Adicionalmente, surgieron múltiples comentarios y opiniones.
La razón de mi publicación era «resaltar» el hecho de que a veces como gerentes nos perdemos en la operación y dejamos de lado la gestión. Algunos coincidieron, aunque otros sacaron a colación otros temas:
- Los gerentes pierden de vista la operación al solo estar «gestionando».
- Los gerentes deben conocer la operación, saber gestionar sin conocimiento operativo no es adecuado.
- Los jefes deben de actuar sin gritos y sin presionar a la gente.
- Los gerentes deben escuchar a su gente, deben inspirarlos y ayudarlos a crecer.
- Esto debería explicársele a todos los gerentes.
Mi percepción es que el tema de la «gerencia efectiva» es el elefante en la habitación. Podemos no hablar mucho de él, pero ante la primer oportunidad, muchos tienen algo que decir al respecto.
Creo, tras muchos años en el tema de la gestión, que está mal entendida. Si solo estás en tu oficina «no necesariamente estás gestionando». La gestión implica muchas cosas y dentro de ella el liderazgo adecuado, el conocimiento de la operación y la cercanía a los que la ejecutan en los diferentes procesos. Hay, en mi opinión, un mal concepto de lo que es gestión.
Lo cierto, lo que no se puede ocultar, es que muchas personas son promovidas a posiciones gerenciales sin tener las competencias requeridas, sin la preparación adecuada. Estas personas harán lo que pueden y perpetuarán estereotipos y malas prácticas.
La gestión ha sido estudiada por gente como Peter Drucker y ha sido revaluada y criticada por gente como Henry Mintzberg. El papel del gerente es complicado. No es cuadrado. Son matices y complicaciones. Es incertidumbre, pero sobre todo es conocimiento de gestión.
El tiempo del gerente se puede distribuir de múltiples maneras dependiendo de la situación, la empresa y otros factores. Lo que no cambia es el enfoque de crear sistemas a través de la gente y establecer los mecanismos para que los procesos generen productos y servicios de calidad. Esto, va más allá de dar órdenes.
El reto, creo, es difundir y hacer accesibles más herramientas y conocimientos para fortalecer la posición de muchos gerentes que no tuvieron la oportunidad, o la iniciativa, de formarse en los temas que son la esencia de su puesto. De hecho, esa es la razón de la existencia de este blog. He escrito múltiples reflexiones al respecto, te invito a leerlas en este fin de año.