Pasado, Presente y Futuro


Michael Gerber, autor del libro “El Mito del Emprendor” menciona que existen 3 roles que adoptan los empresarios (para fines prácticos también los gerentes). Estos son:

  • Técnico
  • Innovador (Gerber lo menciona como Emprendedor)
  • Directivo

El técnico vive en el presente. En este rol creemos que somos los únicos que podemos hacer las cosas bien y que si no lo hacemos, simplemente no suceden. Para él lo importante es la gente y el trabajo que realiza. El técnico es un hacedor.

El innovador vive en el futuro. Está pensando en la nueva forma de hacer las cosas. Continuamente experimenta y mete desorden y caos a las cosas. Le gusta el cambio. El innovador es el creativo.

El directivo vive en el pasado. Voltea hacia atrás y ve lo que no funcionó y crea los métodos y sistemas para lograr consistencia en la operación. El directivo es quien pone orden.

Estos tres roles se “pisan los callos” por así decirlo, pero si aprenden a “bailar” entre ellos pueden lograr grandes cosas. Es necesario un equilibrio.

En mi experiencia, generalmente, uno de ellos tiende a sobresalir sobre los otros. En gerentes medios es el técnico quien sobresale y los gerentes se dedican a hacer trabajos operativos. En los altos directivos y empresarios sobresale el innovador. En este caso, los gerentes se la pasan creando ideas y nuevos proyectos y cambiando la forma de hacer las cosas una y otra vez.

Y el que parece estar abandonado es el directivo, el que administra, el que gestiona. El que establece las reglas, los procedimientos, los métodos, los controles y los sistemas.

En una ocasión tras explicar a un grupo gerencial lo que es la gestión o administración y tras pedirles que anotaran las tareas que tenían pendientes. La mayoría de los gerentes anoto tareas totalmente técnicas. Prácticamente ninguno de ellos anotó algún pendiente relacionado con la gestión.

Uno de los gerente se me quedó mirando y comentó: «¿Entonces estás diciendo que en esta empresa nadie gestiona (administra)?» A lo cual tuve a bien responderle: «No«, le dije yo, «lo dijeron ustedes«, concluí.

El rol técnico es atractivo porque resalta nuestra experiencia en un rubro particular. Es lo que sabemos hacer. El rol emprendedor nos atrae porque nos permite soñar, pensar en un futuro mejor. Pero el rol directivo, requiere de dedicación y mucho orden y es muy necesario en las empresas. No es el más querido en mi experiencia.

¿Y tu que rol adoptas? Si hay cultura de apaga fuegos, pero las cosas se hacen. Posiblemente seas técnico. Si tienes planes y proyectos y cambios continuos. Posiblemente seas innovador. Pero si las cosas no salen como quieres, no hay consistencia, no se cumplen los tiempos, no se logran objetivos. Eso es papel del directivo y conviene explorar como balancear el baile para «no pisarse los callos».

¿Qué estrategias adoptas para balancear los tres roles? ¿Te habías dado cuenta de ello?


6 respuestas a “Pasado, Presente y Futuro”

  1. Gracias Luis por este material¡¡¡

    Mi viernes ahora tiene en que pensar para lograr bailar estos tres roles, en cada decisión que tomo.

    • José Luis. Gracias por suscribirte. Mi intención es que la información agregue valor y nos ayude a mejorar al compartir y reflexionar y comentar sobre la misma. Un saludo.

  2. Mu buen artículo. Yo creo que la mayoria nos ubicamos en el rol técnico y nos cuesta mucho trabajo movernos a los otros dos.

    Como ya en su momento lo señalaste en otro artículo, se debe a que hemos ido moviendonos de responsables de alguna tarea o área a una gerencia y nos es más «facil» hacer lo que dominamos y no buscar ampliar nuestro alcance y aporte siendo gerentes más integrales.

    En la medida que tengamos mayores competencias de Gestión, podremos aportar más y tener resultado mpas efectivos y eficientes.

    • Así es Ricardo. Y yo creo que el primer paso es tomar conciencia y a partir de ahí tomar pequeñas acciones para balancear. El objetivo es crear sistemas y métodos para que nuestros subordinados realicen las tareas. Sin embargo, existen situaciones en las que tendremos que meter las manos, pues los demás no son los indicados. La creación de métodos y sistemas eliminará los «fuegos» y nos dará el preciado tiempo para pensar en el futuro. Para innovar.