Cabeza Fría


En momentos de incertidumbre como los que vivimos. Es fácil dejarse llevar por las emociones y los primeros reportes y tomar decisiones y acciones precipitadas con resultados no muy buenos.

En estos casos conviene mantener la «cabeza fría» por así decirlo y respirar un poco para procesar las cosas. Muchas veces las primeras noticias no son las finales, las cosas pueden cambiar y esperar un poco puede ser bueno.

Colin Powell, ex Secretario de Estado Norteamericano decía que: «En mi propia experiencia, una respiración profunda siempre es una buena primera reacción ante un primer informe. Trate de dejar que una papa caliente se enfríe un poco antes de agarrarla.»

Lo mismo pasa en el entorno de los inversionistas, cuando hay una noticia y la bolsa se precipita, muchos tienen de a vender, lo cual no es lo mejor, esto solo hace que se colapse más el asunto. Muchos inversionistas veteranos mantienen la calma y compran barato en lugar de vender. Saben que las cosas volverán a estabilizarse. Más bien trabajan en tener reservas para aguantar los altibajos.

Como mandos y ejecutivos podemos aplicar estrategias similares dentro y fuera de la empresa. Ante noticias «catastróficas» puede convenir mantener la calma, recopilar más información, evaluar las posibles consecuencias y acciones en caso de que la nota sea cierta. De ese modo se mantiene la cabeza fría y se puede actuar.

Hemos visto en estos días, como se hace un anuncio en el entorno político-económico, las cosa se alborotan, a los días cambian de opinion, se calma, luego vuelven a hablar y es un ir y venir que «calienta la cabeza» y nos puede hacer actuar impulsivamente.

Lo mejor incluso es tener planes de contingencia y análisis de riesgos actualizados continuamente. Decía Peter Drucker que no se puede prever la crisis o la tormenta. Pero se puede preparar a la organización para sortear dicha tormenta. Ahí deberían de estar nuestros pensamientos y esfuerzos.