A lo mejor ya te ha tocado encontrarte con este pequeño relato que nos habla muy bien de como no tener las responsabilidades y autoridades claras se genera confusión, y en muchos casos, inacción.
Este pequeño cuento nos muy diferente a lo que sucede en algunas organizaciones que no se han tomado el tiempo de definir, comunicar y asegurar que se entiendan las diferentes responsabilidades y autoridades de los colaboradores. No es raro que en las organizaciones se generen afectaciones a las operaciones, la calidad, la satisfacción del cliente y los resultados resultado de esta falta de claridad.
Por ello no es sorpresa que la norma ISO 9001:2015 en su punto 5.3 Roles, responsabilidad y autoridades de la organización solicite justamente que se haga esta definición y comunicación. Cuando todo mundo tiene claro lo que a cada quien le toca, el trabajo fluirá con mayor facilidad. ¿Están claras las responsabilidades y autoridades en tu organización? ¿Existen los mecanismos para actualizarlas cuando existan cambios?