Dependiendo de tu edad, es muy probable que en alguna ocasión hayas tenido la oportunidad de jugar, u observar a alguien jugando, algún tipo de video juego. Más allá de si te gusta o no, si eres aficionado a o no a los mismos, has tenido contacto con ellos.
En mi caso, el primero contacto con los videojuegos se remonta muchos años atrás con una computadora Commodore 16 y un Atari 2600. Probablemente estás pensando ¿y eso que tiene que ver con el tema del blog? Te pido que tengas un poco de paciencia, pues voy a elaborar sobre ello.
Dentro de los videojuegos, existe un tipo particular que son los juegos aventura y los de rol. Estos son juegos en los que por un lado te puedes enfrentar a diferentes retos que hay que superar para avanzar y, por otro lado, tienes que seleccionar y utilizar diferentes personajes para poder lograr dichos retos.
Veamos algunos puntos que encuentro de coincidencia entre los juegos de rol y aventura, y el mundo empresarial y corporativo actual en lo que se refiere al ejercicio del liderazgo y de la gestión:
- No darse por vencido. Los videojuegos de aventura y rol implican tenacidad y perseverancia. No hay soluciones rápidas, vas avanzando poco a poco y encontrando retos cada vez más complejos. Con el tiempo aprendes a no desmoralizarte tan fácil, sino a emocionarte con encontrar lo que sí funciona y que te permite avanzar.
- Navegar la incertidumbre. En muchos de los juegos de aventura y de rol tienes un mapa limitado de donde estás, comienzas avanzando y descubriendo nuevos lugares, personajes, situaciones y retos. No sabes que hay adelante simplemente das un paso a la vez y con lo que aprendes ajustas para el siguiente paso.
- Recolectar información. En muchos de los juegos no puedes avanzar sin información, hablas con otros personajes, preguntas, lees, observas y recopilas hechos y datos con los cuales tomar decisiones.
- Interactuar con otros. En estos juegos aprendes que debes hablar con otros, con los que tienen la información, con los que están enterados. A veces, tienes que ganarte su confianza antes de que te den cualquier tipo de información útil o algún objeto que te servirá en tu camino. Tienes que tender puentes entre los personajes para acceder a la información valiosa.
- Aprender experimentando. En ocasiones, en estos juegos, no sabes lo que va a funcionar, tienes que probar varias alternativas. Planteas una hipótesis de lo que podría funcionar y lo aplicas, sino funciona, aprendes sobre lo que sucede. Los errores y fallas te acercan a lo que debe ser, a la solución y ejecución correcta.
- Conocer y explotar las fortalezas de tu equipo. En los juegos de rol tienes que armar pequeños equipos. Debes seleccionar diferentes personajes que te acompañan y tienes que aprender sus talentos y fortalezas. Debes saber seleccionar al personaje o combinación de personajes que podrán sacar el reto adelante. Dejas de ver las debilidades, escoges a los personajes por lo que sí pueden hacer, en vez de criticarlos por lo que no saben hacer. Si algún personaje no encaja con tu equipo, el reto por delante (la tarea a realizar) o tu estilo de juego, lo reemplazas.
- Atracción de talento. No cualquiera se suma a tu equipo. En ocasiones debes de lograr ciertas cosas o tener cierto nivel para que decidan unirse a ti. Tienes que trabajar para atraer a los mejores. Es un trabajo continuo.
- Desarrollo de competencias. Los personajes, en estos juegos, cuentan con habilidades básicas al inicio. Conforme avanzas y tienen logros, van desarrollando habilidades, incrementando su fortaleza, inteligencia y demás. Sabes que si no los desarrollas, no podrán utilizar ciertas herramientas, hechizos o métodos. Sabes que a menos que los lleves a cierto nivel, no podrán vencer los retos que se presentan. Trabajas continuamente por incrementar sus competencias (conocimientos, habilidades y experiencia).
- Llevar una bitácora. Hoy algunos juegos te incluyen un mapa de dónde has estado e inventarios de lo que tienes. Sin embargo, es buena práctica llevar una bitácora anotando ciertas cosas. Haciendo mapas de los lugares que vas descubriendo y marcando los puntos importantes. El conocimiento a lo largo del juego es tan importante como el juego mismo. La bitácora te permite revisar lo que ha sucedido y sacar conclusiones y tomar decisiones.
- Invertir en infraestructura. No puedes avanzar a menos que consigas recursos y mejores el equipamiento y la infraestructura de tu equipo. Mejores espadas, cetros, armaduras y demás son fundamentales para avanzar. Ser diligente en conseguir recursos, conocer dónde comprar los recursos, negociarlos y ponerlos a disposición del equipo es una tarea muy importante.
- Estrategia y cumplimiento de metas. No hay una solución única para completar un juego. Cada jugador puede tomar miles o cientos de decisiones que lo lleven a un mismo lugar. Lo importante es ir estableciendo metas y lograrlas. Ver el bosque y no solo los árboles. Entender los factores externos e internos al equipo y cómo se da la dinámica e interacción entre diferentes personajes y situaciones del juego. A partir de ahí decides cómo aproximarte al siguiente reto. Planteas tu estrategias y avanzas paso a paso. No hay más. Ajustando sobre la marcha conforme obtienes nueva información, conforme se ajusta tu equipo y sus competencias y conforme accedes a mejor y renovada infraestructura.
Estos son solo algunos de los puntos que me vienen a la mente y son temas con los que me ha tocado ver padecer a las personas dentro de las organizaciones. Algunos mandos no poseen estas habilidades y eso limita su efectividad.
Muchos mandos llegan a sus posiciones sin la preparación requerida y comienzan a «aprender sobre la marcha» con muchos tropiezos y malos resultados que eventualmente cuestan a la empresa, a la gente y a los clientes.
No estoy diciendo que los videojuegos fabriquen ejecutivos o gerentes efectivos, simplemente son un entorno controlado en el cual poder poner en práctica conocimientos y habilidades que más adelante podrían trasladarse al mundo real. El reto, al final, es migrar el aprendizaje obtenido en el entorno controlado, de manera gradual a la práctica real y diaria de la gestión y el liderazgo en las empresas.
Las empresas, instructores y especialistas de desarrollo de personal pueden voltear a ver a los videojuegos de rol y de aventura, estudiarlos, y adaptar dinámicas de entrenamiento para desarrollar estas habilidades que he discutido y de ese modo dar herramientas a su personal para tener un mejor desempeño.
(P.D. Si estudias temas de gestión y liderazgo, creo que, podrás ser mejor jugador de videojuegos de aventura y de rol.)