A principios de año reflexionaba y preguntaba sobre los libros que cada uno de mis lectores ha leído.
Hace tiempo, leía un «Tweet» que preguntaba ¿cómo puede un ejecutivo mantenerse actualizado sin asistir a cursos?
En el pasado, al asesorar empresas y gerentes respecto a sistemas de calidad, surgen preguntas en relación sobre cómo «capacitar» a la gente cuando no hay presupuesto para cursos.
Mi respuesta siempre será la misma: LEYENDO. Estoy convencido que leer es una de las mejores formas de obtener información que puede ser puesta en práctica generando conocimiento y competencia. Siempre deberá de existir el factor práctica. Pero definitivamente la lectura permite mantenerse al tanto de las cosas.
Lo importante es distinguir entre libros «académicos» y libros «de negocios», esto es, escritos por gente que trabaja en empresas. Estos últimos son mis preferidos. Aunque uno que otro académico no está mal.
Muchos libros, no son para leerse, son para consultarse. Pero es importante tener a donde acudir cuando se requiere algún tipo de orientación.
¿Y tú cuántos libros has consultado o leído últimamente? Sobre tu especialidad, ya sea técnica o administrativa, ya sea operativa o gerencial. Yo he preguntado en múltiples casos a gerentes y ejecutivos sobre los libros que han leído y, muchas veces, si uno o dos contestan que han leído uno o dos libros al año ya es mucho pedir. Rara vez encuentro a alguien que lea más de 4 en un año.