Uno de los temas con los que me he encontrado a lo largo de los años es la falta de capacidad en ejecutivos y mandos para dar claridad a sus ideas. Y cuando me refiero a claridad es a la capacidad de vincular conceptos de manera adecuada a fin de poder transmitirlos a otros con fines de generar reflexión, entendimiento y apoyo a las ideas que tiene el ejecutivo o mando.
La falta de claridad va a generar pérdidas de tiempo en discusiones eternas, va a generar malos entendidos y en general es una forma de crear o meter ineficiencias en la operación diaria de la empresa.
La falta de claridad genera inacción en temas que pueden ser prioritarios para la organización. Así que el desarrollar habilidades que contribuyan a dicha claridad son fundamentales. Y no solo se tratar de tener «buena comunicación», eso viene como requisito después de que has podido clarificar las ideas.
¿Cómo llegamos a la claridad? Esa es la pregunta del millón. Mucho empieza con un marco de pensamiento adecuado (pensamiento crítico), acompañado de la capacidad de crear una secuencia lógica, de conectar ideas, de aprender a manejar los sesgos cognitivos, de contar con suficiente conocimiento de un tema para poder «conectar los puntos». Es todo un proceso que no se logra con un curso, con una plática, con un libro o con un par de años. TOMA TIEMPO.
Te dejo unas lecturas al respecto si te interesa profundizar.