Gestionar mi desarrollo de competencias


Desarrollar competencias (conocimientos y habilidades) por nuestra cuenta. Requiere en primer lugar tener clara la razón por la cual lo estamos haciendo. ¡Claro que puede dedicar tiempo a desarrollar lo que yo quiera! Pero desde el punto de vista de desarrollo profesional, tiene que ser algo que me ayude a:

1) Mejorar mi desempeño (ser más eficiencia o efectivo).

2) Mejorar mi entendimiento del sistema (la empresa, mi mercado, mi cadena productiva, los procesos y sus interacciones).

3) Prepararme para un movimiento lateral o vertical dentro de la organización.

Las organizaciones crean currículos o planes de carrera, algunas asociaciones profesionales tienen «pathways» o caminos para lograr un cierto nivel de especialización. Sin embargo, si yo mismo soy el arquitecto de mi desarrollo, pues tengo que evaluar dos cosas primero:

1) Dónde estoy en términos de mis competencias (aquí el peligro es no saber lo que tengo que saber).

2) A dónde quiero ir (lo cual puede no estar totalmente claro o cambiar sobre la marcha).

Idealmente buscaríamos tener un plan, pero en ocasiones, las cosas cambian y hay que reaccionar adecuadamente. ¿Cómo? Pues teniendo claro el método a seguir. Una vez que por plan o situación emergente vemos la necesidad de mejorar nuestra competencia, es conveniente tener claro lo siguiente:

1) Investigar sobre el tema en cuestión. Algo genérico, aquí el internet es la clave.

2) Profundizar en el tema en cuestión. Acá cursos y libros son lo adecuado.

3) Recibir orientación. Platicar con otros o seguir gente en internet que publique reflexiones sobre el tema de interés.

4) Aplicar y reflexionar.

No importa el tema, esto será necesario. Claro que es flexible. A veces empiezas por el punto 4 y de ahí brincas al 3 o al 1 y luego al 2. La cosa es que tendrás que pasar de uno a otro de manera continua.

Para que esto funcione en cualquier modalidad, es importante que puedas abrir espacios para realizar los 4 puntos. Por eso la habilidad, conocimiento y competencia más importante es la gestión personal del tiempo.

No importa que bueno sea tu plan recuerda:

1) Las cosas cambian sobre la marcha.

2) Tus intereses y oportunidades cambian sobre la marcha.

3) Lo importante es aprender a aprender y tener el hábito de aprender continuamente.

Aprender algo nuevo (desarrollar nuevas competencias) debe de ser un hábito. Cuando hablo con grupos, sobre todo de mandos, no es raro que no sean capaces de recordar qué fue lo último que aprendieron. Yo, a fin de mantener mi músculo de aprendizaje en forma, acostumbro dedicar un año a aprender cosas nuevas (nada de trabajo) que me permitan transitar los 4 puntos antes mencionados.

Si tenemos tiempo, un plan (o idea de a dónde vamos) y el hábito de aprender, estaremos en buen camino para empezar a desarrollar futuras competencias.